miércoles, 17 de febrero de 2010

Betis 1-1 Hércules y Recreativo de Huelva 1-1 Betis

El Hércules de Alicante se reafirma como líder de la segunda división al empatar (1-1) ante el Real Betis Balompié, en un encuentro entre dos equipos que han protagonizado un fútbol más propio de la primera división.

Betis y Hércules se han repartido los puntos en un partido en el que cada equipo dominó una parte y que finalmente reflejó los méritos de dos de los más firmes aspirantes al ascenso de categoría.

El sello de Víctor Fernández se notó en el equipo bético, empeñado en jugar al fútbol, triangulando el juego y con llegadas al área del equipo adversario.

Así, Sergio Garcìa (m.13) protagonizó la primera ocasión de auténtico peligro en el área alicantina, pero su remate finalmente no encontró el objetivo perseguido.

Pasado el minuto 25 llegó el gol que tanto había buscado el Betis, obra de Sergio García, tras un buen servicio de Emaná. El tanto dio aún mayor serenidad al juego de los béticos ante un Hércules que pareció acusar el mazazo. Hasta las postrimerías del primer periodo el Hércules -que también se empeñó en jugar a fútbol- no tuvo una ocasión clara. Fue Tote quien pudo empatar, pero el meta Goitia rechazó el lanzamiento del delantero que estaba a dos metros de su marco.

En el último suspiro del primer tiempo, Sergio García, tras una falta, a punto estuvo de elevar el 2-0, con balón pegado al poste derecho de Calatayud.

El segundo periodo fue totalmente opuesto, porque el Hércules, con los cambios efectuados por el técnico malagueño Esteban Vigo, pasó a controlar el partido y fruto de ello llegaron las ocasiones como las de Tote (m.48) y luego el gol de Farinós (m.60) ayudado por Capi.

Hércules tocó hasta sobar el balón ante un Betis que solo trató de recurrir a la calidad del camerunés Emaná y los "chispazos" de Sergio García, hasta que fue reemplazado.

Víctor Fernández trató de "refrescar" al equipo con Juanma, Pavone y Caffa, pero el resultado no fue el mismo que en los alicantinos.

Abraham Paz dejó a su equipo en inferioridad, ya en el tercer minuto de la prolongación, por entrada a Nelson, mientras que, tras la falta y el posterior pitido del árbitro, también fue expulsado el camerunés Emaná, al parecer por algún insulto.



Si el Betis finalmente logra el ascenso allá por el mes de junio podría calificarse como uno de los grandes milagros de la humanidad. Eso o que sus más directos rivales sufran una pájara también histórica. Los béticos podrán decir que aún queda mucha Liga, que todo puede cambiar en dos partidos, pero la sensación que les deja su equipo, el nuevo Betis, es que no tiene lo suficiente como para pelear de lleno por el ascenso. No importa mucho que haya mejorado con Víctor Fernández, porque lo verdaderamente importante es que está muy lejos del sólido Hércules, la incombustible Real Sociedad o el ilusionado Cartagena. Y es que ayer, ante un Recre en una situación complicada, que necesita Dios y ayuda para ver puerta, fue incapaz de cerrar el partido cuando lo tuvo de cara y luego, en superioridad, ni siquiera metió miedo a Guaita. Esa situación no la perdonan nunca los de arriba.

Sabían en Huelva que el Betis llegaba con mucha hambre, porque le iba la vida en este partido, y que otro tropiezo les condenaba a encomendarse a la épica para regresar a la élite. Pero el Recre tampoco está para tirar cohetes. Le falta claridad en el último pase, calidad y gol, mucho gol, lo que de verdad te da alegrías y éxitos. Braulio quiere comerse el mundo pero aún no ha dado pie con bola. Y a Barrales, el único que intimidó a la defensa del Betis, más que nada por su corpulencia, le falta ese punto que le haría ser mejor delantero. Lo que en Primera vale para mantener la categoría y lo que en Segunda, donde ahora sufre el Recre, también el Betis, te aúpa a luchar por el ascenso.

En el Betis hay un buen delantero que se llama Sergio García y por eso su intención es luchar por subir, pero con él solo no sirve de mucho. Está más que comprobado, sobre todo si éste no se encuentra a su mejor nivel. Y si encima falta Emaná... Eso sí, el catalán suele estar en el sitio adecuado y en el momento idóneo, por eso es buen delantero, y tiene gol. Ayer demostró que está implicado con la causa y que si el físico no el acompaña, guarda en su fondo de armario la calidad suficiente como para sorprender. Por segunda semana seguida resolvió con maestría para adelantar a su equipo, y de nuevo su gol no le sirvió al Betis para ganar.

Error.

El 0-1 llegó casi al borde del descanso, eso que suelen llamar gol psicológico, pero esta vez no lo fue tanto. El Recre, bien plantado con una defensa contundente, no tenía las ideas claras para mejorar el resultado, pero le valió una ayuda de Iriney para darse la alegría de la tarde. El brasileño perdió el balón donde no debía perderlo y luego Emilio Sánchez mandó el balón a la escuadra, donde Goitia nunca llegaría. Fue un gran gol, que despertó a la sufrida afición onubense, y que volvió a relucir la falta de oficio del Betis. Víctor se tiraba de los pelos porque otra vez a su equipo se le escapaban de las manos dos puntos muy necesarios. Y en Huelva no apareció ese bajón físico que bajó la nota del Betis ante Córdoba y Hércules.

Agné sonrió con el empate y le dio más minutos a su goleador, porque en su cabeza había otro plan. Cuando Emilio Sánchez corría dispuesto a batir a Goitia ya estaba Javi Fuego en la banda para sustituirle. El gol le dio una venia hasta que él mismo se quitó del partido con una falta incomprensible, sin peligro. Pero el Betis no supo aprovechar la superioridad y eso que le quedaba por delante más de un cuarto de hora. El Recre ya había dado por bueno el empate, aunque en el fondo no le alejara del descenso, pero fue el único que creó peligro en el tramo final. Goitia sacó una buena mano tras un disparo cercano de Pablo Sánchez y alertó a los suyos de que el Cartagena, que le iba a ganar al Real Unión, ya estaba a ocho puntos. Y ganó, y el Betis ya está a ocho puntos del ascenso. Dirán que queda mucho pero en Heliópolis la ilusión se va apagando poco a poco. Aunque más de uno aún crea en los milagros. Que los hay.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Córdoba 0-1 Betis

Un Betis con mucha pegada ganó tras 2 meses de sequía fuera de Heliópolis. En la primera mitad tiró 10 veces a puerta y marcó un gol a través de J. Pereira: un balón rebotado que hace que le pegue con la puntera y marque su primer gol en el equipo verdiblanco. En la segunda parte bajó el ritmo, incluso el Córdoba pudo haber marcado, pero un sublime Goitia hizo paradas "de otro planeta". En definitiva, un Betis bastante mejor, esperemos que siga así en los próximos partidos.